Hemos desayuno en el “Café de Kali” situado en la C/ Federico Tapia.
Es un local pequeño con la mayoría de las mesas altas y una terraza reducida.
Tomamos café, croissant y churros. El café muy normal, el croissant muy rico pero los churros estaban un poco “pasados”, se notaba que llevaban tiempo allí y eso que no era muy tarde.
Pagamos 2,80€ por desayuno, independientemente de lo que tomamos, por lo que en principio para la calidad que tenia, el precio nos ha parecido excesivo.